Ecos del Encuentro Ibérico GOT ¡Trabajos quiere el Señor! ¡Obras! ¡Con María! 05/07 - 07/07/2024, Domus Carmeli, Fátima

Llegamos de varios rincones de la Península Ibérica: Vila Verde de Ficalho, Setúbal, Palmela, Lisboa, Guarda, Aveiro, Viana do Castelo, Oliveira do Hospital, España - Ávila y Vitoria.... Entre abrazos, sonrisas y compartir, ¡sentimos el Amor de Cristo que nos une!

La ceremonia de apertura contó con la presencia del Provincial de la Orden de los Carmelitas Descalzos, P. Vasco Costa y P. Joaquim Teixeira. A continuación nos encomendamos a las manos y al Corazón de María, pidiendo su intercesión por los buenos frutos de este encuentro:

"¡Oh, ojalá pudiera cantar, María, por qué te amo!

Por qué tu dulce nombre hace palpitar mi corazón,

y por qué el pensamiento de tu suprema grandeza

no podría inspirar temor en mi alma.

Si te contemplara en tu gloria sublime

y más brillante que todos los bienaventurados,

no podría creer que soy tu hija Oh María, ante ti bajaría mis ojos...".

Santa Teresita del Niño Jesús, Poesías, PN 54 "Porque te amo, María"

El sábado por la mañana, después de un tiempo de oración teresiana, perfumada por la Palabra, el silencio, la escucha y el Espíritu, fuimos a Valinhos, guiados por Fray Carlos Eduardo. En la travesía del desierto -encuentro con Dios- nos damos cuenta de que Dios viene a nosotros; siempre es Dios quien toma la iniciativa y sale a nuestro encuentro. En este encuentro en el desierto, somos tiernamente transformados por la acción del Espíritu, por su Misericordia infinita e incondicional, si estamos dispuestos y confiamos en Él. Podemos contar siempre con la presencia de la Virgen María en este encuentro con el Espíritu, el Hijo y el Padre, pase lo que pase.

Por la tarde, el P. Renato Pereira nos ofreció dos conferencias muy ricas y profundas. La primera analizó el tema de la oración y sus frutos. Nos desafió a cuidar nuestra oración y, como resultado, aparecerán los frutos. La oración - una relación profunda de confianza y amistad con Dios - nos transforma y nos permite unir nuestras voluntades. Seremos capaces de decir a Dios, por nuestro amor a Él: "Quiero lo que tú quieres", viviendo los desafíos de la vida con fe, esperanza y amor. Este amor a Dios se revela en el amor al prójimo y la Fuente de este amor al prójimo es Dios. En el grupo de oración teresiano, podemos crecer en nuestro amor a Dios y al prójimo mientras cuidamos unos de otros, promovemos la unidad del grupo, cuidamos la oración y la escucha de la Palabra. Podemos crecer en leer nuestras vidas a la luz de la Palabra y permitir que nuestras vidas sean un reflejo de la Palabra. Estamos invitados a crecer en nuestras virtudes y en nuestra humanidad.

Para profundizar aún más en la reflexión y el impacto de la charla en cada uno de nosotros, tuvimos la oportunidad de trabajar en pequeños grupos, que resultaron ricos en intercambios y testimonios de cómo la oración transforma y hace de nuestras vidas un pequeño evangelio viviente. Dejándonos amar por Dios, aprendemos a amar como Dios y nos convertimos así en levadura y luz. Renato Pereira abordó el tema de la oración en compañía de María, la Virgen de la contemplación y de la oración. María nos enseña a orar y es un modelo de oración que da frutos. María se vuelve totalmente hacia Dios en la Anunciación, que tuvo lugar en medio de las tareas que estaba realizando, donde acoge con fe la presencia de Dios. Luego se vuelve hacia Isabel (Visitación) y se convierte en puente entre Dios y su prójimo. Dios fluye a través de María hacia Isabel e Isabel es llevada a Dios por María. María, la pobre, la humilde, la amada y habitada por Dios, se convierte en el modelo del orante disponible y receptivo. Tenemos el reto de crear en nosotros esta disponibilidad para escuchar y acoger la presencia de Dios y hacer su voluntad, en medio de nuestra historia, en el lugar y la circunstancia en que nos encontremos. María nos enseña el misterio de la irradiación: la evangelización debe pasar por la irradiación contagiosa de Jesús mismo.

El domingo por la mañana nos visitaron Eduardo y Óscar (coordinadores de GOT en España). Nos hablaron de la misión de GOT en la Iglesia. Esta misión nace de un "sí" personal a lo que Dios nos pide - nace, por tanto, de la Vocación - de la llamada de Dios al Amor de cada uno de nosotros en particular. Recordamos con ternura y gratitud el testimonio de Teresinha do Menino Jesús cuando se dio cuenta de su vocación en la Iglesia: "Mi vocación es el Amor".

Los GOT estamos llamados a ser Amor, a irradiar a Jesús, a convertirnos en Luz por el Espíritu, a compartir el Tesoro legado por el Carmelo, por tantos santos carmelitas, por María, por la Santísima Trinidad.

Finalmente, ¡nos fortalecimos en la Eucaristía! Gracias a Dios por este Encuentro Ibérico de GOT. Mucho más ha sucedido, mucho más ha sido movido por el Espíritu, mucho más ha sido tocado por María... Sirvan estas breves palabras para retarnos a continuar nuestro camino. ¡Gracias a todos los que participaron y contribuyeron para que este bendecido encuentro se realizara